Lectura Recomendada
Noruega non grata (II)
Fecha de Publicación: 06/05/2015
Tema: PolÃtica
Debido a su extensión, fue necesario separar este artículo, generosamente traducido por Susana Barrios Beltranena en dos partes. Por favor busque la primera parte en http://www.opinionpi.com/detalle_articulo.php?id=558
Apoyado por Noruega
Las organizaciones que critican más fuerte es la organización de campesinos CUC, Asociación de abogados Mayas y Fundación Rigoberta Menchú. Las tres reciben ayuda de Noruega. Igualmente el órgano estatal Cuerpo de Paz, que tiene noruegos en el lugar participando en protestas, son mencionados en las críticas.
Las mismas organizaciones niegan que se haya usado métodos violentos en su lucha de oposición, pero los periódicos muestran lo contrario. Tres personas están en la cárcel, una de ellas con una sentencia de 150 años. Cementos Progreso llega más lejos en las acusaciones a Pop y Pascual al acusarlos de ser los “asesinos intelectuales” en la masacre de la familia de María Paula, por impartir falsa información y provocar la rebelión contra la fábrica.
Pascual niega con la cabeza. -Si las acusaciones contra mí y mi organización fueran ciertas, ya estaría en la cárcel. Ellos tienen todo el poder para meterme en la cárcel, con sus juristas, dinero y contactos. Y aquí estoy, sentado y tranquilo dice Pascual.
Tan solo el nombre de él hace que el director de Cementos Progreso salte de la silla.
Pura retórica
Pascual dice que nunca hubiera recibido apoyo de Europa y Estados Unidos si hubieran hecho todo lo que le acusan. Tanto Pop como Pascual dicen que Cementos Progreso trabaja sin descanso para quitar la oposición a la fábrica. Él dice que la fábrica está detrás de la violencia y los asesinatos.
-Las acusaciones contra nosotros es pura retórica. Cuando no logran hacer lo que quieren a causa de la protesta de la gente, nos llaman delincuentes y terroristas para deshacerse de nosotros. La fábrica necesita una excusa para seguir trabajando sin ser molestados. Ahora está el ejército en el lugar, lo que hace imposible que exista oposición, dice Pascual.
Él dice que no están en contra del desarrollo.
-Pero sí estamos en contra del desarrollo que Cementos Progreso representa. El cemento es necesario pero la fábrica debe establecerse donde no haya gente. Hay trabajo ahora, pero contaminación y hambre mañana. Para los mayas la tierra tiene un significado espiritual. Las piedras son los huesos de la tierra y el agua es la sangre. Todo esto será destruido cuando se haga un mayor impacto en la naturaleza y hasta el alimento pueda desaparecer. Eso quiere hacer Cementos Progreso y el gobierno jamás puede comprender.
A través de lo corrupto
Así que por eso ustedes dicen extienden mentiras a la gente sobre las consecuencias de la fábrica? Él se ríe de la acusación. -Nosotros no creemos en los estudios de medio ambiente, eso está autorizado por las mismas autoridades que le dan a la fábrica la concesión de ser operada, esto va a través de la corrupción.
Los estudios dicen que la fábrica usará 100,000 litros de agua por hora, y aseguran que no van a impactar la naturaleza. Fueron los pobladores quienes nos contactaron para ayudarlos a organizarse, no lo contrario.
A Pascual no le interesa lo que la fábrica ha hecho y lo que seguirá haciendo.
La fábrica ya ha destruido la sociedad. No se pueden ofrecer trabajos y al mismo tiempo romper con los derechos humanos para decidir sobre el desarrollo que desean, dice él y menciona el derecho de consulta, que nunca se llevó a cabo después de que las negociaciones se interrumpieron.
-No hay nada fuera de la ley de mostrar oposición, explica, y los periódicos dicen que hay violencia.
CUC es una de las organizaciones más antiguas, ellos creen en otro tipo de desarrollo donde la repartición justa de la tierra, derechos al agua, mejores condiciones de trabajo y mejor tratamiento de cosechas, con menos químicos. Las organizaciones tienen sus raíces en la guerra civil donde pelearon del lado de la guerrilla contra la dictadura militar. Después de 20 años de paz, sigue la línea del mismo conflicto a la vista.
Apoyo legal
Amílcar Pop, abogado que lidera la organización de abogados mayas, también está escéptico.
-Cementos Progreso no paga por el agua que utilizan, sin embargo las personas comunes y corrientes pagan por cada botella que se toman, dice Pop.
Él subraya que ninguno de ellos es un experto, pero que la población local desea estar segura de que la fábrica no venga a destruir su vida. Ellos no han sentido que esto se haya evitado.
Yo no estoy tampoco en contra de la fábrica. Yo estoy contratado como jurista en el caso, por lo cual Cementos Progreso está detrás de mí. Además he llevado al congreso la sugerencia que la fábrica debe pagar más impuestos, eso no es popular, explica Pop, quien dice que ha sido víctima de dos intentos de asesinato.
Uno de ellos fue en el 2008 cuando un pick up blanco chocó contra su automóvil y dos hombres enmascarados trataron de romper las ventanas. Pop escapó conduciendo en reversa, pero fue perseguido por los autores durante casi una hora. No se demostró quién estuvo detrás de esto. El Colegio de Abogados Internacional teme por su seguridad.
Intimidados por la empresa
Él agrega: -Cementos Progreso pertenece a una de las familias más poderosas del país, tienen gente en todos lados; en la prensa, en la burocracia y en el sistema jurídico. Yo he sido acusado de todo desde el 2008, pero nunca han podido probar nada. Yo siento mucho el caso de la familia de María Paula, pero no tengo nada que ver con esto. Cementos Progreso les ha instruido para que digan que las organizaciones están detrás, dice Pop.
Sobre las denuncias que se hacen a las organizaciones que provocan conflictos, él responde: ¿Quién vive por el conflicto? Holcim (el socio suizo de la fábrica) vendió sus acciones a Cementos Progreso y ahí escaló el conflicto. Ahora Cementos Progreso es dueño del 100%. Holcim tenía el 20% y vendió sus acciones en el 2008.
Una iniciativa privada poderosa
¿A quién debemos creer? Nos sentimos confundidos y llamamos al Centro de Desarrollo y Ambiente de Oslo. Aquí trabaja Mariel Aguilar Støen y la profesora Benedicte Bull. Ambas conocedoras de la situación en Guatemala.
-Esto se trata de tres cosas: un estado débil que está ocupado por sus élites, un estado con un sistema judicial muy débil y una masa de medios de comunicación que están manejados por esa élite que defiende el estado, dice Støen quien es guatemalteca.
Ella explica:
-Este estado débil no logra ofrecer seguridad a los habitantes en muchos lugares, por eso ellos mismos se organizan, consiguen armas y toman la ley en sus propias manos. Esto provoca violencia. El que no se tenga conocimiento de quiénes está detrás de estos, solamente demuestra lo malo que funciona el sistema judicial en Guatemala.
La impunidad está sobre el 90 por ciento. A través de anuncios pagados o por propias iniciativas, el sector privado tiene la posibilidad de influir en lo que se dice en la prensa y en la forma como se dice.
Ella subraya que la fábrica de Cementos Progreso y otros grupos de empresarios tienen un nivel internacional alto. -Ellos tratan a sus empleados bien, de eso no hay duda. Pero nuestras investigaciones demuestran que los permisos sobre impacto ambiental son de mala calidad.
¿Racismo?
El racismo es un factor importante, dice.
-Guatemala está llena de racismo. Para la iniciativa privada resulta imposible aceptar que los indígenas tengan su propio criterio. Es por eso, dice, que las organizaciones y la iglesia católica, han influido en que ellos protesten contra el polvo y las hidroeléctricas. Yo he investigado varios conflictos en Guatemala y puedo documentar que la población local primero se organiza y luego pide ayuda a las organizaciones; la protesta y oposición están escritas en la Constitución de Guatemala, esto pertenece a una sociedad democrática. Støen dice que existen razones para sentirse escépticos cuando los empresarios guatemaltecos le piden a Noruega retirar su apoyo a las organizaciones, ellos son parte del conflicto y ellos son los que tienen mayor poder y recursos.
-Las elites han lanzado una campaña para que Europa deje de apoyar a las organizaciones porque afecta a sus intereses, dice Støen.
Bull por su parte, opina que la historia de la iniciativa privada ha creado desarrollo para la mayoría de la gente y piensa que las acusaciones deben ser mesuradas.
-La empresa privada ha sido muy buena en responsabilizarse de la sociedad, al mismo tiempo hacen lo posible por evitar el pago de impuestos, lo que implicaría un mejor nivel de vida y una sociedad funcionando mejor. En Guatemala el estado está siempre en quiebra y debe tomar préstamos de los bancos que pertenecen a la misma élite que maneja el sector privado. Es así como la élite tiene parte en el estado, y tiene casi un control total, dice ella.
El costo de la realidad
De regreso en el campamento comenta María Paula sobre la vida en la aldea Los Pajoques, después de que la fábrica llegó. Lo que era que era un lugar con una sociedad de campesinos pacífica se ha convertido en un lugar lleno de miedo y enemigos.
Nosotros llegamos por nuestra cuenta en busca de Cementos Progreso pero las organizaciones se oponen, nos quieren llevar con ellos. Nadie quiere garantizar nuestra seguridad.
El camino se interna en la vegetación. Pasamos por puestos militares y nuestro carro es observado por binoculares. En algunas casas vemos letreros rojos donde se escribe “No a la fábrica de cemento, sí a la salud”, estos cuelgan de los árboles. Los logos de Winaq, el partido de Pop son los que lideran y están pintados en muchas de las paredes de las casas.
Nosotros nos detenemos y le preguntamos a una chica joven qué piensa usted de la fábrica. Ella está en contra, tiene miedo que la fábrica destruya la naturaleza. Pero no quiere decir más y no permite que le tomemos fotografía o anotar su nombre. Esto se repite con todos a quienes preguntamos. Están en contra de la fábrica, pero rehúsan a hablar con nosotros, ni siquiera pudimos tomar fotografías de la vista.
Un anciano finalmente está de acuerdo en mostrarnos sus plantaciones de flores. Nos menciona el nombre de todas las especies y cuáles son los fertilizantes que necesitan para crecer. Le preguntamos su nombre…
-Eso se me olvidó, lo único que quiero es trabajar y no quiero problemas.
Muy lejos, detrás de unas colinas, vemos el cráter donde la arena de la producción de la fábrica de cemento será sacada.
No quiere hablar
Nos dijeron que existían negociaciones entre las autoridades locales y cementos progreso que sería en las instalaciones de la escuela donde se reuniría mucha gente.
Es domingo por la tarde y llega mucha gente. Mujeres en su traje tradicional indígena llenos de bordados, flores y lindos atuendos en la cabeza. Los niños comen helado mientras los jóvenes coquetean o envían mensajes desde su teléfono celular.
Primero hay un servicio religioso en la iglesia pintada de blanco con cal y se encuentra totalmente llena. Al rato llega el líder de las 12 aldeas alrededor de la fábrica. Una bocina se coloca en el patio de la escuela y les preguntamos si podemos entrevistarlos.
-No. Somos quienes llevamos las negociaciones con Cementos Progreso y no hablamos con nadie antes de que lleguemos a un acuerdo. Después daremos una conferencia de prensa, dijo el vocero Mauro Cosgay.
Nosotros preguntamos muchas veces pero la respuesta fue siempre la misma. Se veía bastante incómodo.
Acordó que podíamos tomar fotografías de la reunión, el video no podíamos. Pero antes de que comenzáramos cambió de opinión.
-Hemos decidido y estamos de acuerdo en que no pueden estar en este lugar durante la reunión popular, tampoco tomar fotografías. Pero ustedes pueden llamar al Cuerpo de Paz en Noruega y ellos les dirán más.
No hay organizaciones en las negociaciones, Pascual y Pop dicen que las autoridades locales están compradas y pagadas por la fábrica. La fábrica dice que finalmente pueden negociar ahora que las organizaciones no intervienen.
Mientras nos alejábamos escuchamos el sonido de las bocinas desde las colinas, hace muchísimo calor, hablan una mezcla de español con mam y no logramos comprender lo que se decía.
Debe Noruega involucrarse?
No solamente es la iniciativa privada guatemalteca que está en desacuerdo con las organizaciones de derechos humanos, muchos países en Latinoamérica están llenos de desacuerdos por el conflicto. Especialmente la extracción de recursos naturales crean los problemas.
Debe Noruega involucrarse?
Kjell Roland, Director del Fondo Noruego
-Cómo afecta el conflicto en Guatemala a los inversionistas de Norfond?
-Norfond no invierte en áreas donde existe la posibilidad de llegar a conflictos con los indígenas. Los inversionistas de Hidro Santa Cruz en Guatemala y SN Power Hidroeléctrica en Chile fueron accidentes de trabajo. Eso no lo volveremos a hacer.
El mandato de Norfond es establecer empresas rentables que no podrían establecerse por alto riesgo.
Aunque ustedes se mantengan a distancia, ¿podría existir un signo de que las organizaciones puedan promover desarrollo en algún lugar?
- Las convenciones de los pueblos indígenas contribuyen a mantener el mundo de los negocios lejos; es casi imposible cumplir con el requisito de “el consentimiento libre e informado con anticipación”
Los convenios no proporcionan la información de cómo los indígenas deben ser consultados. ¿Quién va a hacer el trabajo? ¿Cuál va a ser el contenido cuando se implementa? No siempre es obvio quién va a representar a los indígenas en un área, en cualquier momento cualquier grupo podría aparecer e invadir el proceso. Es demasiado arriesgado para establecer negocios en este contexto y la falta de empresas detiene el desarrollo económico. Sin crecimiento tampoco se pueden llenar los requisitos de sus derechos como educación y salud. Pero también la corrupción y los lazos cercanos entre gobierno y dinastías de familias ricas, hace muy difícil la inversión.
Roland cree que existe una tendencia mundial a que los países en vías de desarrollo reaccionan sobre adonde se envía el dinero de cooperación.
Muchos de los trabajadores de desarrollo llegan de la cultura imperialista del oeste; vamos a enseñarles a ellos a ser como nosotros. Cuando el oeste tenía más poder, nos escucharon, ahora quieren llevar su propia agenda. Es por una parte positivo, significa que existe una clase media con más educación y debatiendo en una sociedad que funciona. Pero me temo que seremos expulsados de los países donde hemos sido socios tradicionalmente si continuamos con una cooperación tan condescendiente como lo hacemos hoy. Desafortunadamente, podemos decirlo, porque los valores del oeste sobre derechos humanos y democracia se debilitan. Pero no debiéramos financiar proyectos que tienen intereses políticos y debate público en otros países si no toleramos que esos países hagan lo mismo en Noruega.
Morten Høglund. Secretario de Estado, Ministerio de Relaciones Exteriores. -¿Debería Noruega tomar partido en un conflicto entre la iniciativa privada y los pobladores locales con organizaciones que están involucradas?
-Noruega no toma partido. Nosotros tomamos partido de acuerdo a nuestros valores, pero son valores universales, basados en las convenciones internacionales, las cuales Guatemala ha firmado, pero por alguna razón no ha cumplido.
-¿Pero Noruega apoya a organizaciones con una agenda definida, la cuales normalmente son de izquierda?
-Noruega puede apoyar partes de las actividades de una organización, no quiere decir que apoyemos su agenda política en su totalidad. Comprendo que pueda ser difícil comprender la diferencia.
-¿La derecha y FRP (partidos noruegos) anteriormente dijeron que la cooperación a Latinoamérica tiene motivaciones políticas, más que un deseo de desarrollo?
-Yo no puedo responder por lo que otros gobiernos han dicho antes que nosotros, pero de este gobierno por supuesto que no. Pero está en las metas de este gobierno incluir a otros actores además de los de izquierda. Entre otros hemos iniciado una cooperación con CACIF que pertenece a la NHO en Guatemala.
Él dice que UD (Ministerio de Relaciones Exteriores) acepta la crítica muy seriamente, pero en este situación él no se reconoce.
-La crítica a Noruega raya en lo peor cuando se trata de lo que deseamos que realmente logre nuestra ayuda a Guatemala.
Muchas de las organizaciones criticadas ya no reciben ayuda de Noruega. ¿Ha ayudado usted a que esto suceda a causa de la crítica?
-Por supuesto que no. ¿Quién ofrece una ayuda y cambia de opinión después? Pero Noruega no dará apoyo a organizaciones que no cumplan con la ley o que traten de detener el desarrollo. Uno no puede decir con toda seguridad que el dinero llega a donde debe llegar. Pero tenemos directrices claras y el mal uso del dinero será castigado severamente. Esto no creo que sea un tema.